Sumérgete en la verdadera esencia del yoga y aprende a meditar paso a paso. En este artículo, te muestro todo lo que necesitas saber para introducir con éxito esta práctica en tu vida.
Un viaje hacia el interior de ti mismo que no te puedes perder.
La meditación es una práctica milenaria que ha experimentado una gran popularidad en Occidente en los últimos años debido a los beneficios que aporta para la salud, especialmente a nivel mental y emocional.
Entre los beneficios para la salud podemos citar que:
Reduce el estrés y la ansiedad
Mejora el estado de ánimo
Mejora la capacidad de concentración y atención
Mejora la memoria y otras funciones cognitivas
Mejora la tolerancia al dolor
Mejora la tolerancia a la frustración
Aumenta la consciencia de uno mismo y de todo lo que nos rodea
Promueve un estado de calma mental, de felicidad y uno se siente a gusto con la vida
En definitiva, la meditación mejora tu calidad de vida y te permite disfrutar de una vida más plena. Es por esto que muchas personas están interesadas en introducir la meditación en sus vidas pero a menudo no resulta fácil. Al principio, supone un esfuerzo que requiere disciplina y constancia, pero poco a poco se empiezan a notar los beneficios y el esfuerzo disminuye. Incluso llegará un momento en el que ya no te supondrá esfuerzo alguno.
En algunos estados anímicos determinados o en estados de estrés o ansiedad elevados puede no ser recomendable, al menos al principio. En estos casos, yo recomiendo algunas sesiones de psicoterapia y practicar asanas (posturas de yoga).
La meditación necesita una mente en calma. Puedes aprender más sobre salud mental en mi artículo Ideas que nos amargan la vida.
En mi consulta de coaching de salud en Barcelona he atendido a muchas personas que no quieren meditar porque dicen que necesitan actividad, hacer cosas, y que no pueden estar parados sin hacer nada. A estas personas recomiendo antes practicar asanas. También hay otras personas que dicen que meditar no vale para nada, que es una pérdida de tiempo. Sin embargo, creo que más bien no han comprendido todavía lo que es la meditación.
Meditar es salir por un momento de la inercia del movimiento, tomar consciencia de quiénes somos y de qué es lo que realmente queremos para dirigir nuestras acciones con acierto.
En yoga, antes de meditar trabajamos la fortaleza física y mental a través de las asanas, la concentración y la movilización de la energía vital a través del pranayama (ejercicios de respiración). Esto nos predispone a estados de la mente más calmados, los que nos permite adentrarnos en la meditación con mayor seguridad.
Meditación para principiantes
Puedes probar esta sencilla meditación pero si te sientes mal o tus niveles de estrés o ansiedad aumentan para, no continues con la práctica quizás no sea el momento adecuado para ti.
No practiques con el estómago lleno, pues podría darte sueño. Ni tampoco con el estómago vacío pues el hambre dificultaría tu capacidad para concentrarte.
Ponte una alarma para no preocuparte del tiempo.
Ponte ropa cómoda.
Busca un lugar tranquilo, cómodo y aireado donde no puedan molestarte y apaga el móvil.
Practica alguna secuencia de posturas de yoga para estirar tus músculos y aquietar tu mente.
Ya estamos listos. ¿Comenzamos?
Siéntate sobre un zafú o cojín para elevar las nalgas del suelo con las piernas cruzadas. También puedes utilizar una silla colocando las rodillas a la altura de las caderas y formando 90 grados entre la pierna y el muslo.
Lleva el coxis hacia adentro y alarga la espalda e intenta crear espacio entre las vértebras.
Ahora lleva los omóplatos hacia adelante y el pecho hacia arriba sin curvar la espalda y los hombros hacia abajo y ligeramente hacia atrás.
Cierra los ojos, relaja los músculos del rostro y lleva el mentón ligeramente hacia el pecho y hacia atrás para alinear la columna vertebral.
Apoya las manos en los muslos o en las rodillas o mantenlas juntas apoyando el dorso de una mano sobre la palma de la otra.
Deja que tu respiración y tu actividad mental se vayan calmando.
Céntrate en el momento presente.
Lleva los sentidos hacia dentro y observa tu mente. ¿Cómo te sientes en este preciso momento? Observa tus emociones y tu estado de ánimo, los pensamientos que te corren por la cabeza. No hagas nada, simplemente obsérvalos, sin juzgarlos, sin elaborar historias sobre ellos.
Observa ahora tu cuerpo, el tono muscular de los músculos que sujetan tu postura y la relajación de los músculos del rostro. Identifica cualquier tensión o dolor y observa sus características. Observa la columna vertebral y sigue alargándola.
Lleva ahora la atención a tu respiración. El puente de unión entre la mente y el cuerpo es la respiración. Céntrate en cómo entra y sale el aire desde la nariz a los pulmones, observa su recorrido. Si tu mente se va a otras cosas vuelve a traer tu atención a la respiración, así tantas veces se vaya tu atención recondúcela de nuevo a la respiración.
Mantente en silencio e inmóvil durante 5 o 10 minutos. Aunque tengas deseos de moverte, no lo hagas, deja que las ganas se vayan y mantén la atención en la respiración.
Finaliza con este mantra,
Hari om tat sat
Acabas de hacer tu primera meditación. ¡Enhorabuena!
Empieza meditando entre 5 y 10 minutos y ve aumentando el tiempo un poco cada día. Procura que siempre sea a la misma hora y en el mismo lugar. Esto te permitirá crear el hábito más fácilmente.
Y no olvides que el yoga es una actitud ante la vida. Observa todo lo que sucede dentro de ti y a tu alrededor, con calma y sin juzgar.
Enhorabuena por tu blog admin, gracias por no usar tantos tecnicismos, me gustó mucho este post y
te seguiré visitando, gracias 😉
Muchas gracias por el aporte y la información proporcionada.
ganaderia caprina candeleda